Los gatitos bebés son adorables y requieren cuidados especiales durante sus primeras semanas de vida. A diferencia de los bebés humanos, los gatitos son mucho más precoces y pueden valerse por sí mismos en pocos meses. Sin embargo, durante su primer mes de vida, y especialmente durante las tres primeras semanas, necesitan de los cuidados de su madre para poder sobrevivir.
Desafortunadamente, hay ocasiones en las que una gata rechaza a uno de sus gatitos o no puede cuidarlos adecuadamente debido a problemas de salud. En estos casos, es importante brindarles el cuidado y el abrigo necesarios para que puedan crecer sanos y fuertes.
Cómo abrigar a un gatito bebé
En las primeras semanas de vida, los gatitos no son capaces de mantener su temperatura corporal, por lo que es fundamental proporcionarles un ambiente cálido y seguro. Durante la primera semana, es recomendable mantener una temperatura entre 30 y 32 grados Celsius. Esto se puede lograr utilizando una almohadilla térmica, una botella con agua tibia o cualquier otra fuente segura de calor.
En la segunda semana, la temperatura puede bajar a 24 grados Celsius, y hacia la cuarta semana, los gatitos ya pueden regular su temperatura incluso en ambientes más fríos.
Además del abrigo, es importante estimular el área anogenital de los gatitos después de cada comida para promover la defecación y la micción. La madre normalmente se encarga de lamer a los gatitos en esta zona para estimular la evacuación, pero en su ausencia, se debe realizar esta tarea manualmente con un algodón húmedo y un masaje suave en el abdomen.
Cuidados en los primeros días de un gato sin madre
Después de la tercera semana, los gatitos ya no necesitan estimulación para evacuar. Sin embargo, es importante limpiar todo su cuerpo con un paño húmedo tibio una vez por semana, simulando los lamidos de la madre.
A partir de la tercera semana, los gatitos comienzan a relacionarse con otros seres vivos, por lo que es recomendable acariciarlos y acostumbrarlos al contacto con personas u otras mascotas. Esto ayudará a que sean adultos sociables y con un temperamento estable.
Cómo darle leche a un gato recién nacido
Si la madre no está disponible para amamantar a los gatitos, es necesario alimentarlos con un biberón especial para gatitos. Es importante colocar al gatito en una posición adecuada, con la cabeza más alta que la cola, para que pueda tragar la leche sin atragantarse. La leche debe salir de la tetina del biberón lentamente, en forma de una gota.
La mejor opción es utilizar una leche formulada específicamente para gatitos, ya que contiene los nutrientes exactos que necesitan para crecer. Es importante evitar la leche de vaca o utilizar una sin lactosa para prevenir problemas digestivos.
Si no es posible conseguir leche formulada para gatitos, se puede preparar una mezcla casera con leche condensada, agua, yogurt natural entero y yemas de huevo. Sin embargo, esta opción no es tan completa como la leche formulada y se debe preparar en pequeñas cantidades para mantenerla siempre fresca.
Cantidad de leche y frecuencia de alimentación
La cantidad de leche que deben tomar los gatitos varía según su edad y peso. Durante la primera semana de vida, se recomienda que tomen alrededor de 13 ml de leche por cada 100 g de peso. En la segunda semana, esta cantidad se aumenta a 17 ml, y en la tercera semana, a 20 ml por día por cada 100 g de peso. Estas cantidades se dividen en tomas iguales y se deben ofrecer al menos 8 veces al día.
Tener en cuenta que es mejor dar un poco menos de leche para evitar trastornos digestivos en las primeras semanas. Los gatitos recién nacidos sanos deben aumentar entre 50 y 100 g por semana, y deben verse rellenitos, firmes, tibios y dormir la mayor parte del tiempo.
Destete y cuidados adicionales
Hacia las 6 a 8 semanas de edad, los gatitos ya pueden empezar a comer alimentos sólidos y se puede comenzar a disminuir la cantidad de leche. Es importante ofrecerles un alimento adecuado para gatitos, como ADVANCE KITTEN, y combinarlo con el biberón para facilitar la transición.
Es recomendable llevar a los gatitos al veterinario para que inicien su programa de desparasitación y vacunación una vez completado el destete. Además, se debe asegurar un entorno seguro y brindarles una atención adecuada para que crezcan sanos y felices.
Cuidar y abrigar a un gatito bebé requiere tiempo, dedicación y conocimientos específicos. Es importante proporcionarles un ambiente cálido, una alimentación adecuada y los cuidados necesarios para que puedan crecer sanos y fuertes. Siempre es recomendable consultar con un veterinario para recibir orientación y asesoramiento personalizado sobre los cuidados de tu gatito.
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